En la 1ª parte de este post vimos cómo podemos mejorar los síntomas de puntos miofasciales en la planta del pie de una forma sencilla.
Ahora vamos a trabajar la movilidad de los dedos del pie y con ello otras estructuras que mejorarán nuestra biomecánica.
Si en un primer momento, desactivamos puntos miofasciales y luego movilizamos , vamos a obtener muy buenos resultados.
¿Por qué?
Porque con el vídeo de la pelotita voy a mejorar síntomas, reducir dolor, preparar el tejido y disminuir la señal de alarma que nuestro cerebro puede percibir.
Y ahora con estos ejercicios voy a mejorar la movilidad. Ya sea porque la he perdido o porque mi pezuña casi siempre ha sido una pezuña. Y algo que no se mueve, generalmente, no funciona bien. Los pies suelen pecar de poco movimiento debido al calzado-cárcel que se suele utilizar.
¿ Cuál es el calzado ideal? Uno que te permita:
Espacio para que los dedos se puedan separar entre sí. Y “empujar” el suelo cuando caminamos.
Mover el resto de articulaciones mediante un mínimo grosor de suela. Hoy en día existe el calzado minimalista con esta característica.


¿Puedo utilizar ese calzado desde ya?
No. Primero debes entrenar el pie. Y el vídeo de hoy te va a ayudar
Prueba los ejercicios. Si tu movilidad es reducida, realiza los que muestro al principio. Si vas mejorando, avanza. Pero si no, no te preocupes. Te puedes tirar meses con una secuencia de baja intensidad hasta que seas capaz de soportar cargas mayores.
Hay varias lesiones que pueden sufrir los pies. Yo te puedo hablar de la mía. Mi peor experiencia con los pies y a la vez una situación de la que aprendí mucho fue una metatarsalgia en ambos pies. El dolor era muy, muy, MUY intenso. La causa fue la inactividad de parte de los músculos de pie provocando un excesivo apoyo de los metatarsianos. Mi pie siempre ha tenido el arco transversal plano y ello facilitó todo lo anterior durante años.
Tardé meses, pero mejoré la función de la musculatura “dormida” y ahora mi pie es más funcional y gracias a eso: No duele.
Espero que no tengas que pasar por algo así, pero lo que tengo claro es que se pueden prevenir estos y otros dolores si realizamos ejercicios que contrarresten la cárcel que imponemos a nuestras pezuñas.
Rodrigo Guadián.


